Teniendo la pandemia de trasfondo y las dificultades de ocupar el espacio público, Unicx mutó en la escala de sus obras porque los unicornios, que originalmente fueron pensados como esculturas, se redujeron a estatuillas para su padrinazgo y adquisición. Facundo Suárez, director y artífice de la iniciativa, comenta, «Desde 2019 veníamos trabajando en un sistema de gestión para dar un mensaje de solidaridad y de unión y decidimos elaborar un plan de acción para la emergencia». La iniciativa se puede seguir en la web: www.sosunicx.com
Quienes gestionan Unicx se ocupan del trabajo con los organismos públicos, de la búsqueda de artistas, de visibilizar el proyecto y de convocar empresas, coleccionistas, personas interesadas en participar. Sin embargo, es fundamental el eslabón de los artistas que donan su tiempo para el proyecto -como dice Federico Baeza, curador de la iniciativa-, el Estado que habilita el canal y el sector privado que aporta un monto económico, cuya recaudación será destinada a sector vulnerados en la emergencia.
Falgbt – Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans como agente recaudador del proyecto, las 17 esculturas de unicornios que están siendo intervenidas en esta edición por un conjunto de artistas seleccionados por Baeza fueron posible gracias a la adhesión de la municipalidad de Córdoba y los gobiernos de Tierra del Fuego y Ciudad de Buenos Aires. Una vez terminadas, las obras estarán dispuestas con un monto fijo para su padrinazgo y adquisición con fines solidarios de muchísima ayuda.
Suarez argumenta, «De esta manera, generamos una cadena de acciones voluntarias que no pueden ejecutarse en tanto y en cuanto uno de les participantes que confluyen no hagan el aporte que tiene que hacer. La causa que hoy estamos queriendo ayudar es llevar asistencia a la población travesti y trans y refugiades LGBT de todo el país que en este momento tienen necesidades básicas con la pandemia». Las donaciones de esta edición serán para los tres distritos que acompañaron la iniciativa.