En una primera etapa, alcanzará a los que sean titulares de los planes del programa Ciudadanía Porteña, que tengan una edad de, entre 25 y 60 años, sin hijos a cargo que no cuenten con alguna relación laboral registrada. Se abre la posibilidad de realizar capacitaciones para vincular a los planes laborales con salida laboral.
Es una forma de facilitar a todas las personas que reciban los beneficios de los planes, puedan tener la oportunidad de realizar cursos de capacitación en una gran diversidad de opciones. Es un paso adelante en el propósito de ofrecer a los ciudadanos, la oportunidad de mejorar y crecer, a través de trabajos formales. Que se pueden lograr con el conocimiento y calificación para realizar determinadas tareas, con cursos gratuitos, a elección de los interesados.
En este caso, en el inicio de este programa, se apunta a un universo de alrededor de 10 mil personas, que están comprendidas dentro de ese segmento etario y condiciones indispensables. El Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, ha puesto en práctica, el programa Ciudadanía Porteña para los hogares vulnerables de la Ciudad, en el año 2005. Se comenzó a implementar por medio de la Ley Nº 1878 de la Ciudad de Buenos Aires.
Se trata de un subsidio mensual, a través de una tarjeta emitida por el Banco Ciudad y Cabal. Está destinado a que sea utilizado específicamente para comprar alimentos, productos de limpieza e higiene personal, útiles escolares y combustible para cocinar. No es una solución definitiva, pero ayuda a mejorar el ingreso de los hogares. Dispone de dos programas adicionales. Uno de ellos es la Red Primeros Meses, un subsidio complementario, que brinda la posibilidad de contribuir para atender la salud de las embarazadas y de sus hijos, durante el primer año de vida.
El otro programa es Estudiar y Trabajar, el cual apunta a impulsar la continuidad educativa, apoyando a los ciudadanos entre los 18 y 40 años para que tengan la oportunidad de completar sus estudios. En cualquiera de los niveles que sean necesarios. Aquellos interesados, que se encuentren dentro del segmento de personas alcanzada por el programa que se ofrece en estos momentos, deben actualizar sus datos de manera obligatoria, hasta el 31 de mayo. Se realiza de manera virtual o presencial en la sede del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, con turno previo.
Se ofrece una serie de opciones para mejorar sus habilidades, capacitarlos de manera gratuita y acercarles ofertas laborales: “La primera es la formación para el empleo. Los beneficiarios deberán asistir a cursos de formación laboral de acuerdo a sus intereses y conocimientos para fortalecer capacidades. Las capacitaciones serán brindadas por la Agencia de Aprendizaje, dependiente del Ministerio de Educación. Los beneficiarios obtendrán saberes específicos que les permitan mejorar sus posibilidades de inserción laboral. Los contenidos fueron desarrollados junto con los sectores productivos estratégicos de la Ciudad en función de la demanda de perfiles en el mercado”.
La disponibilidad de capacitaciones ofrecidas, son muy diversas y alcanzan a las siguientes actividades, a elegir por la persona interesada: colocador de placas de roca de yeso; pintor de obra; operador de herramientas de presentaciones digitales; operador de herramientas de marketing digital; gomero balanceador; tester de aplicaciones; bartender profesional; camarero y mozo de salón; reparador de celulares y tablets; y operador de gestión y procesamiento de datos. Como se puede notar, es un abanico muy completo de posibilidades.
Se cursan compatibilizando lo presencial con lo virtual. Para inscribirse es necesario ingresar a: [email protected]. Esta actualización se solicita para conocer con exactitud los datos que definen el perfil de cada uno, para que puedan acceder a la capacitación adecuada y luego de completada, acercarles ofertas de formación y empleo adecuadas. Ese es un punto interesante, porque la Ciudad está ofreciendo, a través de estas nuevas medidas, capacitarlos y ayudarlos en la búsqueda laboral. Para que tengan la oportunidad de insertarse en el mercado del trabajo.
Para cumplir con el objetivo, de lograr este propósito, después de completadas las capacitaciones, llega el momento de las ofertas que se le proporciona: “Los beneficiarios también tendrán acceso a oportunidades de trabajo. A través de intermediación, la Ciudad les acercará ofertas de empleo para que puedan integrarse al mercado formal y así generar más ingresos y autonomía”.
Por su parte, los titulares de los planes, deben presentarse en las entrevistas. No pueden suspender su asistencia a más de dos sin una justificación. En ese caso, no seguirá en el programa hasta que realice una nueva entrevista sociolaboral. También, es motivo de suspensión del programa, el rechazo de dos ofertas laborales concretas.
Salvo que se justifique por las siguientes razones: Si el salario ofrecido, se encuentra por debajo del mínimo. Cuando la distancia del lugar de trabajo al domicilio genera una duración de más de dos horas de viaje, en cualquier transporte público. Incluye también como excepción, a cualquier motivo de salud, presentando el certificado médico correspondiente. El jefe de Gabinete de la Ciudad, Felipe Miguel, define con detalles precisos el concepto de la asistencia a las personas vulnerables. No es de gran ayuda, que continúen cautivos de planes que solo suponen una asistencia temporal.
El objeto es sostenerlo mientras se le facilita su capacitación para dotarlos de mejor disponibilidad de recursos, para acceder al empleo laboral, genuino y sustentable: “Nuestra visión es que la asistencia debe ser temporal y el rol del Estado dar oportunidades para que las personas que necesitan una ayuda momentánea, puedan salir definitivamente adelante. Las oportunidades implican responsabilidades. Si queremos salir adelante en la Argentina tenemos que volver a poner como prioridad la cultura del esfuerzo y la responsabilidad”.
Por Francisco Grillo