“Pase lo que pase y dirija quien dirija, la camiseta número 10 será siempre mía” DAM
Nadie está preparado para las partidas definitivas, y mucho menos, cuando esas partidas tienen que ver con un grande del fútbol de todos los tiempos, un ídolo popular que desde Fiorito conquistó al mundo entero: Diego Maradona el guerrero, el domador y hechicero de la pelota.
Supo hacer de cada partido una fiesta. Una sensación de alegría infinita invadía apasionadamente las tribunas en cada cotejo. Era tan intensa y poderosa su alegría contagiosa, que era capaz de llegar a televidentes y radioescuchas…
El miércoles 25 de noviembre al mediodía el corazón del “10” dejo de latir. La peor noticia para todos aquellos que disfrutamos del fútbol, de ese entrañable ida y vuelta electrizante, de los piques, del cortarse solo, picar en punta, de birlar el balón,…hasta llegar al objetivo: perforar la red del arco rival…
Su sueño fue jugar al fútbol y con la camiseta argentina ganar el mundial. Y lo logró, “el pibito de Villa Fiorito” había podido llegar a lo más alto del podio, no sin esfuerzo y experiencias difíciles, controvertidas, pero lo hizo una y otra vez, en nuestro país, y en el exterior también.
Su talento, magnetismo y personalidad hicieron que muchos bebes nacidos en los ochenta se llamaran “Diego Armando”…El crack carismático y sin parangón, acuñó a lo largo de su trayectoria varias frases ingeniosas, explosivas, no exentas de un particular sentido del humor, como por ejemplo:
-“Yo crecí en un barrio privado de Buenos Aires. Privado de luz, de agua y de teléfono”.
-“Llegar al área y no poder patear al arco es como bailar con tu hermana”.
-“Muchas veces me dicen: vos sos Dios…y yo les digo: “están equivocados”. Dios es Dios y yo soy Diego, soy simplemente un jugador de fútbol”.
-“De los apodos, el que más me gustó fue Pelusa, porque me devuelve a la infancia. Me acuerdo de Fiorito cuando jugaba por la gaseosa y el sándwich. Aquello era más puro.
-“Mis hijas legítimas son Dalma y Giannina, Los demás son hijos de la plata o de la equivocación”.
-“Si Pelé es Beethoven, yo soy Ron Wood, Keith Richards, y Bono, todos juntos”.
-“Yo me equivoqué y pagué, pero la pelota no se mancha”.
Hoy el querido Diego de la gente se fue de gira…Se convirtió en una leyenda inolvidable que abrazaremos para siempre los que amamos el fútbol jugado con las entrañas, con destreza inusual, con amor y hambre de gol.
Descansa en Paz Capitán de la Selección Nacional y muchas gracias por las alegrías brindadas cada vez que asomaba tu figura amigable, energética, sonriente en el centro del mejor estadio donde te haya tocado demostrar tu arte…
¡Hasta siempre Campeón!
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